Por: Enrique Valle
Mucho nos hablan de los descendientes de las 10 tribus perdidas, y mucho se ha definido, pero no todo.
Es lógicamente conocida la historia del suceso que aproximadamente 750 años ADC los asirios conquistaron la tierra prometida y deportaron a los hebreos a marcharse a de sus tierras, destruyeron el templo de Salomón y fue solo 70 años después que se les permitió retornar a Jerusalén.
No todos regresaron, la gran mayoría se dispersó por el mundo y es de ahí que se generaron las leyendas de las 10 tribus perdidas, que dan solución a grandes cuestionamientos litúrgicos sobre la creación del mundo y los orígenes de los pueblos, hoy en día ante el progreso de la humanidad, todas esas leyendas no dejan de ser simplemente eso, leyendas.
Lo cierto es que cuando Cristóbal Colon programó su viaje al oriente, vía el océano, se creía que llegaría a la India, con una ruta más cercana y segura, donde muchos mercaderes obtenían sus preciadas mercaderías después de largos viajes por tierras desconocidas, una pregunta teológica surgió y hubo que buscar respuestas generales para que fueran aceptadas por las autoridades fue la de que a cuál de los Hijos de Noé eran descendientes los habitantes de esas Tierras?.
Recordemos que según las Sagradas Escrituras, hubo un “Diluvio Universal” que aunque hoy lo vemos como una leyenda, aparece en muchas de las creencias del pasado lo que nos indica que de alguna manera si hubo un acontecimiento grave de inundaciones, el hecho es que las Escrituras dicen que al finalizar el diluvio, los hijos de Noé: Shem, Cam y Jafet, se repartieron por el mundo al norte al sur y al occidente y repoblaron la tierra.
Así pues al Oriente no fue ninguno de ellos y por lo tanto teóricamente los habitantes de esas regiones debieron salir de algún lado. De donde entonces eran descendientes los habitantes de la India y China?
La respuesta teológica de ese entonces fueron las 10 Tribus perdidas de Israel, y Cristóbal Colon se imaginó que de ser así, el Arameo podría ser un idioma local, por esa razón dentro de su tripulación llevaba consigo un poliglota, que hablaba idiomas variados como el Inglés, Alemán entre otros y el Arameo también, su nombre “Luis de Torres” un judío Converso, hoy encontramos que la sinagoga de Freeport en las Bahamas lleva su nombre.
Lo anterior nos indica que cuando Colon llego a la Isla de Dominica, el 12 de Oct. De 1492 y bajo de su Carabela en un bote, llevaba consigo al poliglota que supuestamente le iba a traducir lo que los nativos le hablaran, esto igualmente nos dice que desde el primer momento del descubrimiento un Judío toco suelo americano además de que se cree que igualmente Colon era uno también.
Aun así, encontramos leyendas indígenas en América que nos indican que quizás no estaban tan errados los teólogos de ese entonces quizás algunas tribus perdidas de Israel si llegaron antes que Colon y ayudaron a poblar el territorio.
Los pobladores de la sabana de Bogotá conocidos como los “Muiscas” y/o “Chibchas” eran una tribu que ha dejado muchas memorias, entre ellas la del famoso “Dorado” en la laguna de la Guatavita y que fue perseguida por los conquistadores en busca de ese tesoro. Dentro de las creencias que ellos tenían era la de un personaje llamado “Bochica” un hombre blanco, de ojos azules, de barbas hasta la cintura que según su tradición fue quien les enseñó a hilar, tejer, cultivar la tierra y además fue quien creo el salto de Tequendama, considerado un “dios” para los pueblos indígenas de la región.
Bochica que era un hombre anciano, desapareció, pero prometió regresar y esta fue la razón por la cual lo “endiosaron” llegó de la nada, y se fue sin nada y les dejó un legado importante, además de las manualidades, les educó y les mostró cómo se debían comportar con los semejantes.
Cuando los españoles llegaron los indios pensaron que Bochica había regresado y fueron recibidos con grandes actitudes.
¿Será entonces que Bochica pertenecía a una de las diez tribus de Israel? detallemos… era blanco y de ojos azules con barba, todo esto nos indica que el origen no era local los indios en general eran de piel morena, y sin barbas o sea que bien podría ser algún navegante perdido de Europa, y quienes más si no los hebreos de Jerusalén quienes llegaron a Sefarad (España) en la época del rey Salomón, bien pudieron continuar navegando y llegar a lo que hoy es el continente americano.
Una nota interesante que nos da mucho en que pensar.