Imprímeme

El Jurassic Park geopolítico 2022

Por: Victor Zajdenberg

“Escoge la vida, para que vivas tú y tu posteridad”,  Deuteronomio 30:19

Haremos un sintético Balance de Situación sobre las varias Potencias existentes en el mundo, las que pueden influenciar en los acontecimientos que se desarrollen durante el presente año y los venideros. No habremos de tomar en cuenta los efectos de la Pandemia, desatada a comienzos de 2020, a fin de radicar esta breve auditoría solo en los efectos políticos, económicos y sociales de cada Estado Nacional. Y decimos “Nacional” porque ya es un hecho que el Nacionalismo es la doctrina que rige las acciones actuales de los países de la Tierra; las ideologías, en todas sus formas y deformaciones, y las religiones, en todas sus variantes, han sido reconvertidas en nacionalismos, en muchos casos populistas.

Estados Unidos

En los 4 años del Gobierno de Trump se han logrado avances fundamentales tanto en el Medio Oriente como en la marcha imparable de China sobre Occidente. Los “Acuerdos de Abraham” con los Emiratos Árabes y Bahrein al frente, el reconocimiento del Golán como parte de Israel y el traslado de la Embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Jerusalém, Capital del Estado de Israel fueron hitos históricos que han quedado grabados para el camino hacia la paz en el Cercano Oriente.

El Presidente Biden, quien no ha modificado estos logros, solo insiste en el Proyecto de “Dos Estados para Dos Pueblos”.

En relación a China, Biden elaboró un “Sistema de Defensa Común” que involucra a Australia, Japón y Corea del Sur, abarcando todo el Océano Pacífico en el cual China se ha encontrado con  límites a sus avances geopolíticos.

Dónde Biden, no solo por su culpa, ha cometido un error humanitario y una pérdida como Potencia Hegemónica, lo que demanda un “rethinking” de su poderío global, fue en Afganistán con esa humillante retirada después de 20 años de guerra, primero con Al Qaeda  y luego con los Talibanes, dejando un país sumido en la desgracia más absoluta, especialmente para los niños y las mujeres.

China

Este Imperio no es comunista; se trata de una Potencia Totalitaria Capitalista con un Gobierno dictatorial y un Presidente de por vida que se llama Xi Jinping. La base ideológica un nacionalismo que pretende la conquista mundial con el uso de todas sus capacidades militares, económicas, financieras y fundamentalmente con la utilización tecnológica de control social y personal de todos los habitantes de sus dominios. Y decimos que es un Imperio Colonial habiendo comenzado con la ocupación del Tíbet, siguiendo con las tierras de los Uigures, prosiguiendo con Macao y Hong Kong, mientras en forma sistemática sigue ocupando y poblando islas que pertenecen a Vietnam y otros, siendo su próximo objetivo colonial la conquista de la República Democrática de Taiwán. Con cautela ha hecho resurgir el antiguo y famoso “Camino de la Seda” que comienza en Pekín y está llegando al corazón de Europa en el Puerto de Trieste.

El Confucianismo no es una religión; es un sistema que inculca a obedecer a la Autoridad que, mediante el orden y la disciplina, logra contener a la población, lo que la Dictadura aplica con toda severidad y contra los Derechos Humanos.

Rusia

A partir de la desintegración del Imperio Soviético (1991) la Federación Rusa, surgida de la cenizas, tuvo que pasar por diversas etapas traumáticas con el fin de transformar una “religión” comunista en la búsqueda de un nuevo tipo de sociedad que contuviera a sus 150 millones de habitantes. El enorme desafío fue pasar de una economía totalmente planificada por el Estado Central a un sistema capitalista de libre mercado y de una degradación del poder de su Ejército (después de Afganistán) a tratar de volver a convertirlo en una potencia militar.

El período Yeltsin resultó ser un desborde del capitalismo salvaje hasta que en el año 2000 asume, en sus varios cargos, Vladimir Putin. Es posible que sus intenciones originales fueran integrar a Rusia con Europa, pero la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) vislumbrando a una Rusia debilitada y vulnerable avanzó con su Organización para encerrarla militarmente. Cuando EE.UU y Europa pretendieron hacerlo también con Ucrania, mediante un golpe de estado civil, ya Rusia se encontraba fortalecida y decidida a impedirlo. Este conflicto se ha convertido en una especie de “Guerra Tibia” que está aún pendiente de resolución.

Alemania

Después de 15 años del “Gobierno Merkel”, marcando el ritmo de la UE (Unión Europea), la Sra. Merkel se retira del poder equiparando lo sucedido luego de la 2ª GM con Churchill. Este, habiendo sido un héroe de la Guerra derrotando al nazismo, pierde las elecciones en Gran Bretaña ganando los Laboristas. Con la ex Canciller Merkel ha pasado casi lo mismo; habiendo sido una gran dirigente  mundial, los Social Demócratas logran conformar un nuevo Gobierno con los Verdes y los Liberales y sin los Social Cristianos. Gran decepción, pero la Democracia alemana sigue en pie; veremos con que futuros objetivos.

Estado de Israel

El nuevo Gobierno que asumió en 2021 aparenta estar lo suficientemente consolidado como para permitirse, entre sus ministros, las más diversas contradicciones sin que la Coalición se caiga. Debemos recordar que esta Alianza abarca a Partidos de Derecha, de Centro, de Izquierda y de Árabes Israelíes. Uno de los ejemplos que más sorprendió fue cuando el Primer Ministro Bennett afirmó que “Nunca habrá un Estado Palestino” y en la misma época, un Ministro de la Izquierdista Meretz informaba a políticos europeos que están a favor de un Estado Palestino. A todo esto Abbas, el Árabe israelí que integra éste Gobierno, líder de Ra´am (Lista Árabe Unida), emite una declaración verdaderamente sorprendente diciendo: “Israel es un Estado Judío y seguirá siéndolo”. Existe una famosa frase: “no los une el amor sino el espanto”. Y el espanto tiene un nombre: el ex Primer Ministro Benjamín Netanyahu que hoy está en la Oposición, aun cuando las encuestas reflejan que todavía sigue siendo el político con más apoyos populares del país.

Los enemigos de Israel siguen siendo los mismos: en el sur el Hamás en Gaza; en el norte el Hezbollah en Líbano y un poco más lejos Siria y la teocrática República Islámica de Irán.

Este análisis es una fotografía que, para comprobar sus efectos, habrá que esperar el devenir a fin de conocer su desarrollo y consecuencias.