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Palabras a graduandos CCH – junio 2022

Por: Jorge A. Mejía González

ND: El Dr. Jorge Mejía quien fuera durante muchos años rector del Colegio Colombo Hebreo (CCH), en su nueva época de pensionado, liberado de todos sus difíciles quehaceres de docente y dirigente, no descansa. Actualmente se dedica a escribir y relatar no solamente sus experiencias sino sabios consejos que se deberían tomar en cuenta. Le pedí compartiera su actividad como escritor, pero antes me gustaría publicar éste valioso discurso dedicado a los graduandos del 2022, pues me parece educativo no solamente para ellos.

¡Es increíble que se estén graduando! Parece que fue antier que estaban en la oficina de Rectoría, tomando clases de matemáticas.

Sí tengo un consejo que les quiero dar. Si uno mira la situación del país: las elecciones, las marchas y las protestas, los indicadores de pobreza, todo lo que ha pasado en los últimos años, se evidencia un país dividido, lleno de odio y resentimientos. Esto sólo demuestra que mi generación falló estruendosamente en hacer de este país un lugar equitativo y con justicia social.

Para bien o para mal, esta labor les queda a ustedes; son la última esperanza que tenemos para mejorar este país y volverlo un lugar vivible.

Claro está que es más fácil decirlo que hacerlo, por lo tanto, recomiendo tres acciones concretas.

Primero, es importante apoyar esfuerzos existentes que se centran en el trabajo social, como hicieron ustedes en el programa “Heros for Life” de Israel, “Un Techo para mi País”, o todo lo que hace tan magníficamente CADENA.  Estas son fundaciones que ya llevan un camino recorrido y que tienen metas claras para resolver problemas sociales específicos. Toda la ayuda que puedan recibir es poca, sea con aportes económicos o directamente como voluntarios.

Segundo, cuando trabajen para empresas o crean la suyas, cada empleo que originen es un aporte importante, no solo a la economía sino a cada una de las familias que contraten. Una vez hecho esto, sean - como se dice coloquialmente - “buenos patrones”. No se imaginan la importancia de algo tan simple como pagar los salarios a tiempo; esto genera una seguridad invaluable en las familias. Una gestión justa garantizará no solamente mejores condiciones para sus trabajadores, sino que asegurarán personas agradecidas y dispuestas a dar lo mejor de sí mismas.

Tercero, y tal vez sea lo más importante, traten a las personas que trabajan para ustedes, para su familia, para su empresa por igual y como iguales. Además de ser lo correcto, es una actitud basada en el valor profundamente judío que es la empatía. Este trato respetuoso, en el día a día, es el primer paso para romper con las barreras de clasicismo que nos tienen tan agobiados en este país.

Les mando un abrazo grande. Se les quiere y se les extraña.