Por: Raquel Goldschmidt
Una de las enfermedades que agotan el alma y la mente de los humanos actualmente son los fake news, las mentiras en las noticias y que finalmente se podrían convertir en parte de la historia.
Buscando para mis estudiantes actualidad en videos sobre el conflicto en el medio oriente enfocado Hacia Israel, causas, consecuencias, etc. encontré sorprendentemente varias versiones de la historia en su gran mayoría distorsionando los puntos básicos de los hechos y conflictos, inclinándose en favor del lado palestino en su mayoría y desacreditando la imagen verdadera de Israel.
Preocupada de cómo va a quedar injertado en los libros de historia estos hechos, investigué inicialmente el motivo por el cual los historiadores pueden presentar un cuadro deforme de la historia y los hechos que probablemente harán parte de la historia.
La perspectiva de la noticia desde el ángulo desde donde se ve influye en las emociones y conceptos preconcebidos, un ejemplo actual es las noticias de los hechos provenientes desde Gaza, quienes emiten las noticias y que las agencias noticiosas captan y reproducen, son los mismos terroristas que han creado la actual guerra. Noticias que repiten en los más importantes noticieros sin que las agencias de noticias confirmen los hechos.
Además, los intereses personales y políticos influyen en la visión de los hechos y probablemente quedarán estampados en los libros de historia, cada gobernante desea ser “el héroe” de la acción, el salvador, el merecedor del jugoso premio de la paz, el sentirse poderoso y/o ser representante de una potencia dominante.
También las fuentes históricas que ya venían distorsionadas afectan e influyen en las composiciones históricas por venir.
Uno de los más notables ejemplos de distorsión histórica se observa en la negación de la existencia del Holocausto, lo cual en la mayoría de los países se ha logrado corregir (esta vez), aunque aún persiste en la visión histórica de algunos países.
Una manera de corregir la distorsión histórica y de los hechos es a través de una investigación rigurosa, tanto de los hechos que ocurren en el presente, informándose desde todos los ángulos y aprendiendo a escucharlos y entenderlos, como de los hechos ocurridos anteriormente (esto último es difícil cuando se trata de épocas de las que ya no persisten sobrevivientes o documentación fiable).
Un análisis contextualizado y exhaustivo ayudaría a entender la verdad de los hechos.
Principalmente toda gira alrededor de la educación temprana y continua. Si desde joven se alimentara a los estudiantes a investigar desde ambos lados de las opiniones y comprobar los hechos, si los maestros mostraran y desarrollaran la educación sobre bases de justicia, derecho, respeto, amor y definitivamente NO TOLERANCIA (porque tolerar el crimen, la injusticia, el racismo, segregacionismo, etc. No es una virtud), los valores de la sociedad seguramente cambiarían, reformándose poco a poco dando una visión más clara y una vida más digerible, sana, moral, ética y espiritual.