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Casanare bendice Israel por tercera vez

Por: Hashavúa

Entre sus mil actividades en Bogotá, el Rabino Alfredo Goldschmidt, subió en la avioneta que lo llevaba al evento en Yopal, capital del departamento de Casanare. Mientras se sorprendía con el magnífico paisaje colombiano, pensaba también en la grandeza del momento que estaba por vivir, ¿Cuándo, en un país, alguien había tenido la suficiente personalidad como para realizar un evento de esa magnitud, para bendecir a Israel?, ¿Por qué estaba sucediendo esto?, después que el pueblo judío ha sido tan rechazado, esquinado, pordebajeado, perseguido, después que muchos noticieros aprovechan la ocasión para resaltar a la comunidad judía cuando alguno de sus miembros “parece” que supuestamente comete algún delito; estaba sucediendo algo maravillosos, algo que ver con amor, del verdadero, con amistad, pero principalmente con bendición y con Dios.

Casanare tenía una deuda muy difícil de manejar, su producción agrícola, ganadera y su petróleo, no alcanzaban para cubrir ni la deuda, ni muchas de las necesidades del departamento. Hasta que un día, un hombre, sin doctorados ni maestrías, simplemente un hombre sano, un hombre creyente, nacido en la región, un hombre al que la corrupción de la política aún no había alcanzado, fue elegido como gobernante de su territorio. ¿Y qué pasa cuando un personaje así es nombrado gobernador?

En Yopal, Casanare, al oriente del país, territorio llanero, de botas y sombrero blanco, su gobernador Josué Alirio Barrera realizó un gran festejo, el tercero que realizaba durante su mandato, con el único objetivo de bendecir a Israel. Un hombre que, a pesar de la crítica y molestia de algunas personas, resolvió que podía recibir ayuda Divina paralelamente a su trabajo y esfuerzo, ¿y qué pasó?, sus tierras empezaron a producir maravillas, enormes yucas, pepinos y otros productos de tamaños descomunales, que ensombrecían las antiguas cosechas. Ganadería de calidad y el mejor petróleo que produce la tierra colombiana. A esto se le agregó el pago total de la deuda de Casanare.

Al invitado de honor, el Rabino Alfredo Goldschmidt, lo recibió una comitiva que lo condujo al estadio donde 20 mil personas le esperaban ansiosamente, batiendo las 15 mil banderas de Israel, cantando y bailando frente a un escenario decorado con objetos que recordaban el Antiguo Testamento. El pastor Eduardo Gómez, entre los presentes, fue entrevistado por la revista Aurora de Israel *1. Estaba el pastor Darío Silva Silva quien fuera uno de los más brillantes periodistas en Colombia y hoy dirigente de una de las iglesias más importantes, “Casa sobre la Roca”, exponiendo su discurso*2: “…la unidad de Israel con el pueblo cristiano es una necesidad no solamente espiritual sino para el mundo una necesidad política y de cualquier naturaleza que uno piense…”. Importante también el brillante discurso del director Ejecutivo del CCJC, Profesor Marcos Peckel, relatando historias y aportes de Casanare a la lucha libertadora y las similitudes con el Estado de Israel.

El evento festivo presentó, aparte de los importantes discursos de las personalidades presentes, actos de cultura y arte, que resaltaban el valor cultural de la región y su hermandad con el pueblo de Israel. Casi veinte grupos de danza y canto escogieron piezas judías que competían por ser la mejor presentación. 


Aparte de los personajes presentes que visitaban desde fuera de los límites territoriales de Colombia, se presentaron pastores de las importantes iglesias cristianas en Colombia, la iglesia católica, políticos, senadores, representantes de instituciones judías, y otros*3. Durante el evento, se concedieron diversos galardones, y el principal galardón fue recibido de manos del Gobernador Barrera para el Rabino Alfredo Goldschmidt, y el Profesor Marcos Peckel, el cual fue emitido por decreto “Condecoración Gran Orden al Mérito Cívico Ramón Nonato Pérez”.

Este fue también un día de alegría y fiesta para la población de Casanare. Para el gobernador y para su pueblo, lo más relevante y el momento más sublime, fue cuando se recibió la bendición del Gran Rabino Goldschmidt.

Este año, el gobernador Josué Alirio Barrero, termina su gestión como gobernador, y sus acciones quedarán en la historia de éste territorio, tanto la historia económica como su historia espiritual, pero principalmente deja un legado de amor, que Dios quiera, sea el principio de una continuidad de hermandad entre pueblos, que buscan sabiduría, amor y paz, y que ésta reine por encima de las críticas de personas maliciosas, políticas o simplemente Trolls.


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*1 Link al artículo relacionado en Aurora, con la entrevista realizada al pastor Eduardo Gómez

*2 Link a la parte del discurso del pastor Darío Silva Silva que se refiere al evento y a la región - Link al discurso completo

*3  Representantes: