¿Qué impulsa a una persona para odiar a otra?

Cada uno tiene diferentes parámetros que lo hacen actuar de forma diferente a otros seres humanos; puede ser envidia, o celos o simplemente el carácter que lo hace pensar que porque él o ellos y no yo y por lo tanto debo actuar en contra de esa persona.

Sin embargo, eso es en el ámbito particular. No todos “odiamos” a todo el mundo, ni todo el mundo nos “odia” a nosotros, por consecuencia, la importancia se vuelve personal del individuo afectado por el “desamor” de otro individuo.

Con el tiempo, el avance en la ciencia y tecnología, ha hecho del mundo un lugar “pequeño” en donde lo que pasa en un lugar tiene repercusiones en otro lejano.

El odio, más que el amor, ha repercutido de una manera bastante preocupante y la principal causa es la ignorancia.

En pleno siglo XXI todavía se debate el antisemitismo, que es antisemitismo y que lo define.

Como ya sabemos, fue una palabra creada especialmente para el pueblo judío, los árabes son semitas también, en cambio se dice racismo contra…

Sabemos que Israel resucito de las cenizas del Holocausto. El artículo dice: “el debate sobre la definición de la alianza internacional del Holocausto ha llegado a nuevos límites, docentes y estudiantes reclamando la cláusula que menciona a Israel como el culpable limitar la libertad de palabra a los “Palestinos” y el derecho de ellos a atacar a Israel”. También están proponiendo quitar a Israel del concepto del antisemitismo y forzar a los judíos a aceptar la demonización.

Estos con estos están siendo promovidos por judíos de izquierda que además algunos están a favor del BDS.

J STREET es un grupo pro-Israel, pro - paz, pero quienes consideran que tienen todo el derecho de criticar a Israel (por mi parte creo que si uno vive en otro lado y no sufre la situación, no tiene derecho de hacerlo) y hacen campaña con el gobierno para que limiten su ayuda monetaria al país.

Recuerdo, hace muchos años, consideré que todo judío debería vivir en Israel, luego me di cuenta que eso es muy difícil por no decir imposible y quizá un poco contraproducente, ya que es una relación simbiótica de mutua necesidad.

Lo que los judíos tendemos a olvidar es que sin Israel, no tendríamos la “libertad” que tenemos.

Acuérdense de Alemania antes de la segunda guerra mundial, el judaísmo estaba completamente asimilado y pasaron de ser prominentes miembros de la sociedad, la música, las letras y la ciencia a ser parias, perseguidos, atacados y asesinados.

No olvidemos quiénes somos, como tampoco debemos olvidar que sin Israel perderíamos la tranquilidad.