2024-04-20 [Num. 979]


Parashat Ki Tisá

Moshé ve la Gloria Divina

Este Shabat 22 de Adar I, de 5784, 2 de marzo de 2024, se leerá la Parashá de Ki Tisá “Cuando establezcas”, del libro de Shemot.

Resumen

Moses tables 2

Dios ordena hacer un censo de la población mayor de 20 años. Para que no fueran a morir al ser contados, cada uno debía dar medio shekel como rescate. Ordenó construir una pila de cobre para que los cohanim purificaran allí manos y pies. Preparar un óleo especial y perfumado para consagrar objetos del santuario. Igualmente ordenó a Moshé preparar el incienso perfumado especial para colocarlo frente al Testimonio. De estas mezclas para el incienso prohibió su reproducción para ningún otro uso. 

Dios eligió a Betsalel de la tribu de Judá y a Aholiav de la tribu de Dan para crear los diseños de metales, piedras preciosas y  todos los utensilios y ropajes. Pero recuerda al pueblo que el día Shabat "habéis de observar", ordenó Dios, siendo éste un signo entre Dios y todas las generaciones venideras, aquel que no cumpla con ésta ley, su alma será truncada de entre su gente. Al concluir de hablar Dios, le entregó a Moshé las Tablas del Testimonio de piedra escritas por el Poder de Elo-him.

El pueblo se puso nervioso al ver que Moshé se demoraba en bajar y le pidió a Aarón hacer dioses, Aarón le pidió a la gente reunir aretes de oro, que fundió y armó un becerro de éste oro, ellos dijeron que estos eran los dioses que los sacaron de Egipto. Hizo entonces Aarón un altar y avisó a la gente que al día siguiente harían una celebración ante Ado-nay. Al día siguiente ofrecieron holocaustos y se pusieron a festejar. Enojado Dios le avisó a Moshé que quería exterminar al pueblo, pero Moshé Le rogó que no lo destruyera, para que los egipcios no hicieran burla de la salida de los hebreos de su tierra, recordándoles también Su promesa a los patriarcas. Se arrepintió entonces Ad-nay del mal que pensaba hacer al pueblo. 

Al bajar Moshé y ver lo que estaba sucediendo, furioso arrojó las Tablas de Ley que había escrito Dios por lado y lado con Su poder; fundió el becerro de oro esparciéndolo sobre las aguas que el pueblo debió beber, además reprendió a Aarón. Se colocó Moshé en la puerta del campamento y dijo que quien estuviera con Ad-nay se acercara a él, la tribu de Leví se acercó y les ordenó matar a los infieles, ellos así lo hicieron, muriendo alrededor de tres mil hombres. Después de esto rogó Moshé a Dios para que perdonara al pueblo.

Dios ordenó a Moshé conducir al pueblo al destino previsto, a una tierra que mana leche y miel, pero que no acompañaría al pueblo por ser duro de cerviz y no quería exterminarlo en el camino, al saberlo el pueblo se sumieron en un gran duelo. Moshé levantaba la tienda de reunión fuera del campamento, y cuando Moshé entraba a la tienda, se cubría con la columna de humo que todo el pueblo veía; allí hablaba Dios con Moshé.

Moshé le pidió a Dios conocer Sus caminos y conocerlo a El. Dios le concedió ésta maravilla a Moshé permitiéndole ver Su Gloria detrás de El. Al día siguiente subió Moshé al monte con otras dos tablas talladas, allí pasó Ado-nay sobre Moshé cubriéndolo con Su mano y proclamó los 13 atributos Divinos. Le prometió Dios a Moshé que desterraría a los pueblos enemigos que estaban en la tierra prometida pero que Israel no debía concertar ningún pacto con los habitantes, pues éstos serían trampa en el seno del pueblo.

Confirmó la prohibición de idolatría, la obligación de celebrar Pésaj y comer matzá durante siete días, el Pidión Haben, Shabat, Shavuot, tres veces al año ir ante Dios, ofrendar las primicias y no cocer el cabrito en la leche de su madre. 

Después de cuarenta días y noches bajó Moshé con las nuevas Tablas del Testimonio. El cuerpo de Moshé irradiaba, por lo que se tuvo que cubrir el rostro con un velo. 


La interacción entre lo humano y lo divino. Comentario de la Parashat Ki Tisá por el Rabino Alfredo Goldschmidt del Centro Israelita de Bogotá.

Explicaciones

Éxodo 31:3 al 5: Y lo he colmado con espíritu de Elo-him, con sabiduría, con inteligencia y con conocimiento en toda labor para crear diseños, para labrar el oro, la plata y el cobre y para la talla de pedrería para engastar y para la talla de maderas, para hacer toda labor”.

El Rabino Dr. Aryeh Leibowitz, explica que “el hombre fue dotado de sofisticadas habilidades cognoscitivas, con la capacidad de pensamiento abstracto, que le permite operar en un nivel teórico utilizando imágenes mentales para trascender lo superficial y conceptualizar para entender los conceptos y realidades. El resultado de esta habilidad es la búsqueda voluntaria de la excelencia, la majestuosidad y la belleza para crear un ambiente que refleje estos ideales”.

Cada persona está dotada por Dios de cualidades significativas para crear con sus pensamientos y llevarlos a la acción o actividad, con un propósito, a veces aparentemente insignificante, otras veces remarcable. El libre albedrío del hombre permite que, dentro de su propio carácter, desarrolle su potencial hacia un bien general, hacia un bien personal o hacia el mal.

Cuando se entiende las enseñanzas de Dios a través de la Torah, se puede entender hacia dónde se deben dirigir las potencialidades humanas, aprendidas o innatas, se entiende que se puede aportar a este mundo de creación Divina, un granito de belleza y humanidad, bienestar y felicidad, ciencia, amor y sabiduría, que llevaría al hombre a un estado de superioridad espiritual y entendimiento.

Incluso un trabajo aparentemente insignificante como lo es el diseño, Dios puso tanto énfasis en este proyecto, para que el hombre entienda que cualquier idea, labor, trabajo, pequeña o grande, puede marcar un paso importante de la humanidad.



Ver más explicaciones

Éxodo 31:1 y 2 y parte del 13: “Habló Adonai a Moshé diciendo: Mira: he designado por nombre a Betzalel, hijo de Uri, hijo de Hur de la tribu de Yehuda”.

El rabino Menahem Rapoport (Italia Siglo XV), explica que Dios solo le ofrece un consejo a Moshé queriendo decir que Él lo elegiría siempre y cuando le agrade a Moshé. El rabino Marcos Edery dice que, de esta explicación de Rapoport, nuestros sabios deducen que no se puede designar un dirigente para la comunidad, a menos que ésta haya sido consultada. Edery muestra que más adelante Moshé hace lo mismo con el pueblo (Éxodo 35:30).

El tema de la democracia aparece desde los inicios de la Torah y la consulta desde el mayor hasta el menor, en este caso de Dios al líder elegido y del líder al pueblo. Cuando se llega a la ejecución de la elección, aprobada por una mayoría, queda solamente atenerse a la disposición del elegido. El elegido debe rodearse de personas de justicia y que no deseen poder y fortuna, para ser asesorado tal como ocurre cuando el suegro de Moshé viene y al ver que él administraba justicia solo, le aconseja delegar funciones en manos de hombres de virtud y verdad. (Éxodo 18 al 21).



Éxodo 30:37 y 38: “Y el incienso que habrás de hacer, según su composición no haréis para vosotros. Sagrado será para ti ante Ado-nai. El hombre que hiciere como él para inhalarlo, será truncado de su pueblo”.

Aquí hay dos prohibiciones: la primera es la de elaborar el incienso tal como se elaboraba para el ritual Divino en el Santuario, esto estaba prohibido reproducirlo, pero no indica una acción punitiva. La segunda prohibición era hacerlo para inhalarlo, éste si indicaba una pena bastante grave a nivel espiritual.

La utilización de objetos, elementos o vestimentas designadas para labores de Santidad, debían ser exclusivas para la función correspondiente, el respeto y la irrupción  de lo ajeno, especialmente cuando de santidad se trata, es considerado uno de los más altos niveles de moral dentro de la educación judía.

Si cada ser humano debe ser tratado con respeto, él y todo lo que le pertenece, con mayor razón aquello que incumbe a la Divinidad. Al no seguir dichas pautas, el concepto moral y ético se deteriora desenfocando el valor de la integridad y de la misma vida. Prestando atención, los delincuentes han corrompido su concepto de respeto al derecho ajeno y su moral y ética ha decrecido a los más bajos niveles.

Estos defectos de personalidad se pueden corregir desde tempranas edades, por medio de una educación en la Torah y en las buenas costumbres.



Exodo 30:37:  “El incienso que habrás de hacer, según su composición no haréis para vosotros. Sagrado será para ti ante Ado-nai”.

El Rabino Noaj Wainberg Z”L, director de Aish Hatorá Internacional explica que de acuerdo a lo aprendido en Berajot 43b del talmud, el olfato es el sentido del alma, pues dice Rav Zutra Bar Toviva “¿De dónde se aprende que recitamos una bendición por la fragancia?, porque está escrito: que toda alma alabe a Dios”. Wainberg entonces retoma éstas enseñanzas y explica la pregunta: “¿Qué es algo que el ama disfruta y no el cuerpo?, y contesta: debe ser el placer del olfato, el olfato es el sentido del alma.

Abravanel, por su parte, declaró que el incienso era el servicio más espiritual de todos  los que se realizaban en el Templo.

La pérdida del olfato es uno de los males que aquejan a aquellos que sufren de la actual pandemia del Covid-19. Los profesionales de la salud nos dicen que es el sentido que nos avisa si algo está bien o mal, si algo nos gusta o no, incluso, el olor de las personas nos alertan para bien o para mal y nos avisan los expertos que la memoria olfativa es la más notable de todos los sentidos. Numerosas terapias se han desarrollado para devolver el sentido del olfato a quienes lo han perdido.

El grado más espiritual se encuentra en el olfato, es por eso que al finalizar Shabat, dentro de la ceremonia de Havdalá, se cumple con la ordenanza de bendecir el sentido del olfato, para que quede en la memoria el agradable paso de Shabat por nuestras vidas.



Exodo 30:35 y 36 “Y harás con ello el incienso, compuesto según el arte del perfumista, mezclado, puro, consagrado. Y pulverizarás parte de ello muy fino y lo pondrás delante del Testimonio, delante de la Tienda de Reunión, donde he de reunirme contigo allí. Sacrosanto será esto para vosotros”.

Las características de los elementos para elaborar el incienso final, son altamente curativas en lo físico y lo espiritual. Casi todos estos elementos son de muy agradable olor al ser quemados excepto el gálbano, cuyo olor se describe como tierra. Estaba restringido únicamente al lugar más sagrado del tabernáculo y se encendía en el momento en que Moshé entraba para hablar con Dios. Hay varias interpretaciones de su utilización. Interesante que el sacerdote o Moshé, antes de entrar al recinto debían lavarse las manos y los pies, y posteriormente se exponían a dicho incienso “curativo” o preventivo, además de relajante. Se podría decir que la santidad del lugar se percibía en todos los sentidos. Este incienso era trabajado por un perfumista experto. Estas características acercaban a la esencia de la Divinidad a nivel humano, y esos momentos de enseñanza profunda fueron transmitidos al mundo entero por medio de la Torah y al pueblo de Israel puntualmente.



Exodo 31:35 “Y harás con ello el incienso, compuesto según  el arte del perfumista, mezclado, puro, consagrado”.

En el Talmud (Berajot 43b) se enseña que el olfato está íntimamente relacionado con el alma. Esto se basa en la similitud entre las palabras Ruaj que significa alma o espíritu y Reiaj que significa perfume.

Es indudable que muchas veces, cuando se percibe un olor, trae a la memoria imágenes y recuerdos, el olor del campo, de una piscina (pileta), el olor del pescado o de la comida de Shabat, el olor del perfume que usa alguien especial, malos olores del cuerpo humano, olor del aceite del carro (auto), de la gasolina… oler con los ojos cerrados nos trae a la mente imágenes que amamos o que nos son desagradables.

El santuario tenía un olor específico hecho en base de determinadas plantas indicadas por Dios, compuesto que estaba prohibido reproducir para ser inhalado fuera del santuario. Las personas que se acercaban para llevar las ofrendas, y especialmente los Cohanim que se encargaban de lo referente a las ofrendas, podían relacionar ésta fragancia con la Shejiná (presencia Divina).

No son pocas las veces que se habla en la Torah y el Talmud sobre el tema de los aromas, la importancia de las fragancias en la vida judía es remarcable. Algunas personas piensan que el olfato no es una necesidad humana, en realidad lo es. Retirar el olfato a una persona es casi como retirarle parte de sus sentimientos, de sus emociones, del alma; los médicos no se preocupan mucho si una persona pierde el sentido del olfato, no es una emergencia, algo vital.

Dios me dio la posibilidad de haber perdido durante más de un año el sentido del olfato. Aprendí que sin el olfato es difícil saber si la leche está pasada, un huevo sale podrido o si algo me gustaba o no. Me daba tristeza, o a veces indiferencia no sentir el olor de mi esposo en su cercanía, o la cercanía de mis amistades… me faltó algo no preciso, pero sí precioso durante ése tiempo, hasta que, gracias a Dios, un doctor me estabilizó y volví a disfrutar de las fragancias y olores en general de la vida, me devolvió algo del alma.



Exodo 30:34 “Dijo Ado-nai a Moshé: Toma para ti aromas: estacte, uña aromática, gálbano en incienso pur; en cantidades iguales habrán de ser”.

El Rabino Marcos Edery trae una interesante interpretación de Rashi que explica que el Gálbano producía al quemarlo un olor desagradable, sin embargo estaba incluido dentro de los otros ingredientes que tenían un olor agradable, para el lugar santo del Tabernáculo. Con  esto se quería insinuar, dice Rashi, que con ello en todas nuestras oraciones tenemos que asociar con nosotros aún a aquellas personas consideradas “Poshe Israel”, -Los rebeldes de Israel-. No se debe descartar a ningún judío que busca algún acercamiento espiritual. Si el alejamiento se produjera, sería imputado a los tzadikim –justos-, ya que el judaísmo cree en el principio de la responsabilidad colectiva.

Yo creo que ésta importante visión judía va más allá del de esperar al judío a que se acerque. El ramillete de esencias escogidas, no dependían si ellas estaban disponibles o no. Esas esencias fueron escogidas exactamente así. Por eso pienso que aquél judío rechazado por algún motivo, debe ser de todas maneras incluido dentro del pueblo de Israel, ya que cuando se le rodea de gente de cualidades altas, la persona tiende a regenerar su camino, o a redirigirlo de una manera positiva.



Exodo 30:30 y 31 → “Y a Aarón y a sus hijos habrás de ungir y los consagrarás para servir ante Mí. Y a los hijos de Israel hablarás diciendo: Oleo para unción de objetos sagrados, será esto ante Mí, por vuestras generaciones”.

Moisés ungiendo a Aaron (albert2u.wordpress.com)En la página de Chabad de Lubavitch explican: “Es el precepto con el cual se nos ordenó que tengamos óleo elaborado de una forma específica dispuesto para ungir con él a todo Sumo Sacerdote que sea nombrado, tal como El dijo: Y el Sacerdote más grande de sus hermanos, sobre cuya cabeza ha sido vertido el óleo de unción... Asimismo, se unge con él también a algunos reyes como ha de ser explicado en las leyes de este precepto. Con él ya se ungió el Santuario (Móvil del desierto) y todos sus enseres; no se unge con él, empero los enseres (del Templo) para las generaciones (posteriores) , pues como explicación dijeron en el Sifrí que con la unción de estos —es decir, de los enseres del Tabernáculo— fueron consagrados todos los enseres del futuro venidero. Dijo El, exaltado sea: Oleo de sagrada unción será éste para Mí, para vuestras generaciones. Las leyes de este precepto han sido explicadas ya al comienzo (del Tratado Talmúdico) de Keritot”.

Es interesante notar que el pueblo de Israel elaboró este óleo de unción, y no la tribu de Leví. Es como que la existencia misma del sacerdocio dependiera del pueblo, no era independiente en ningún aspecto. El poder no se concentraba en el sacerdocio, para poder ser sacerdote, el pueblo debía ser el manufacturador de todo aquello que le sirviera para serlo. Solamente el servicio a Dios, lo que eran las ofrendas, las manipulaba el sacerdote, y eran las ofrendas del pueblo. Un buen gobernante depende no solamente de sus capacidades y talentos para gobernar, de sus conocimientos y profesionalismo, un buen gobernante debe estar pendiente de las necesidades del pueblo y ser su instrumento, ser el generador de las soluciones, el que sabe escuchar y aceptar, quien se ha formado bajo las condiciones de quienes debe gobernar.



Exodo 30:31 y 32 → “Y a los hijos de Israel hablarás diciendo: Oleo para unción de objetos sagrados será esto ante Mí, por vuestras generaciones. Sobre cuerpo de persona no será vertido, y según su composición no habrás de hacer como él. Consagrado es, consagrado será para vosotros”.

El rabino Menahem Rapoport explica que ninguna persona podría hacer uso profano del aceite de unción, incluyendo aún a personas como reyes y cohanim, que han sido ungidos una vez.

Aquello especialmente preparado para consagrar a Dios y hoy, aquello que se utiliza en las sinagogas para el ritual, como el yad para leer la Tora, las coronas de las Torot, la Bimá, que es específicamente para colocar la Tora para ser leída, etc. deben cumplir específicamente el rol para el cual han sido manufacturados. Esta disposición enseña a dar reverencia a Dios, y posteriormente aprender a definir el lugar que le corresponde a cada persona, según su valor humano y status en liderazgo, teniendo presente siempre que Dios es el Ser Supremo merecedor de lo mejor que pueden dar nuestros corazones, entendamos o no su definición y existencia.



Éxodo 30:33  “El hombre que elabore como él*1 o que lo pusiere sobre profano, será truncado de su pueblo”

*1: Como el óleo para unción de objetos sagrados

El Rabino Samson Raphael Hirsch explica que el óleo sagrado era específicamente para consagrar personas y objetos sagrados. Es comprensible que copiar este sello o usarlo para cualquier otra cosa que no sea el uso de santificación ordenado por Dios, equivale a una negación del hecho de la santidad de Dios, o equivale a una profanación de la santificación Divina. Tal acto implica "Caret" que sea arrancado de la vida judía en el presente y en el futuro.

Ni siquiera se le ocurriría a un judío, hoy, sacar una Torah y hacer dibujitos sobre ella, o utilizarla para prestársela a alguien a la casa y colocada en un mueble de libros comunes. Cada objeto del Santuario tenía su función y era respetado para lo que era. El óleo sagrado era de muy fácil manufactura y se podía prestar para imitarlo y ser utilizado para otros fines, lo cual humillaría la intención para lo cual estaba elaborado.

La Torah también enseña el respeto por los objetos, de ahí que la sinagoga, como lugar de culto es respetado con condiciones como no comer adentro del salón de rezo, no dormirse allí, etc. Esto también entrena a respetar los objetos ajenos. Si un culto diferente tiene una imagen o un símbolo de su religión, hay que respetarlo y cuidarlo, a menos que sea localizada en un lugar sagrado para los judíos, esto es considerado un irrespeto a la Ley de Dios y la sagrada tierra de Israel. La mezquita de Omar que fue levantada encima de donde estaba el Templo de Jerusalem, se ha considerado una profanación al lugar que Dios eligió para Su lugar del culto. Vendrá el momento en el que venga el Meshiaj enviado por Dios y la situación sea aclarada. Mientras tanto, no se puede hacer nada, más que tener la ilusión.



Exodo 30:30 y 31 → “Y a Aarón y a sus hijos habrás de ungir y los consagrarás para servir ante Mí. Y a los hijos de Israel hablarás diciendo: Oleo para unción de objetos sagrados, será esto ante Mí, por vuestras generaciones”.

En la página de Chabad de Lubavitch explican: “Es el precepto con el cual se nos ordenó que tengamos óleo elaborado de una forma específica dispuesto para ungir con él a todo Sumo Sacerdote que sea nombrado, tal como El dijo: Y el Sacerdote más grande de sus hermanos, sobre cuya cabeza ha sido vertido el óleo de unción... Asimismo, se unge con él también a algunos reyes como ha de ser explicado en las leyes de este precepto. Con él ya se ungió el Santuario (Móvil de l desierto) y todos sus enseres; no se unge con él, empero los enseres (del Templo) para las generaciones (posteriores) , pues como explicación dijeron en el Sifrí que con launción de estos —es decir, de los enseres del Tabernáculo— fueron consagrados todos los enseres del futuro venidero. Dijo El, exaltado sea: Oleo de sagrada unción será éste para Mí, para vuestras generaciones. Las leyes de este precepto han sido explicadas ya al comienzo (del Tratado Talmúdico) de Keritot”.

Es interesante notar que el pueblo de Israel elaboró este óleo de unción, y no la tribu de Leví. Es como que la existencia misma del sacerdocio dependiera del pueblo, no era independiente en ningún aspecto. El poder no se concentraba en el sacerdocio, para poder ser sacerdote, el pueblo debía ser el manufacturador de todo aquello que le sirviera para serlo. Solamente el servicio a Dios, lo que eran las ofrendas, las manipulaba el sacerdote, y eran las ofrendas del pueblo. Un buen gobernante depende no solamente de sus capacidades y talentos para gobernar, de sus conocimientos y profesionalismo, un buen gobernante debe estar pendiente de las necesidades del pueblo y ser su instrumento, ser el generador de las soluciones, el que sabe escuchar y aceptar, quien se ha formado bajo las condiciones de quienes debe gobernar.


Exodo 30:31 y 32 → “Y a los hijos de Israel hablarás diciendo: Oleo para unción de objetos sagrados será esto ante Mí, por vuestras generaciones. Sobre cuerpo de persona no será vertido, y según su composición no habrás de hacer como él. Consagrado es, consagrado será para vosotros”.

El rabino Menahem Rapoport explica que ninguna persona podría hacer uso profano del aceite de unción, incluyendo aún a personas como reyes y cohanim, que han sido ungidos una vez.

Aquello especialmente preparado para consagrar a Dios y hoy, aquello que se utiliza en las sinagogas para el ritual, como el yad para leer la Tora, las coronas de las Torot, la Bimá, que es específicamente para colocar la Tora para ser leída, etc. deben cumplir específicamente el rol para el cual han sido manufacturados. Esta disposición enseña a dar reverencia a Dios, y posteriormente aprender a definir el lugar que le corresponde a cada persona, según su valor humano y status en liderazgo, teniendo presente siempre que Dios es el Ser Supremo merecedor de lo mejor que pueden dar nuestros corazones, entendamos o no su definición y existencia.