Según el cabalista Rav Phillip Berg*1 Rosh Hashaná no es el “año nuevo”, de hecho, Rosh Hashaná se celebra en el séptimo mes del calendario hebreo bíblico. Este es un momento especial durante el cual se estructura el ciclo espiritual del universo. De esta manera, Rosh Hashaná no es “la cabeza del año”, sino la semilla del año. Una semilla positiva, genera un año positivo, y es nuestra oportunidad de señalar cuál es la semilla que queremos plantar para el año que sigue. Mientras más duro trabajemos en cambiar nuestras tendencias negativas, más energía positiva estaremos inyectando a nuestras vidas y así, nuestra semilla germina y nuestro año florece con paz y prosperidad en lugar de caos.
Es por esto que aunque no es el primer mes del año, se le conoce como la cabeza de todos los meses.
La mayoría de las personas asocian el Shofar de una manera meramente tradicional, explica Rav Berg, y como nos hemos mantenido ignorantes al verdadero propósito del Shofar, su efecto en nuestras vidas se ha hecho insignificante. El poder del Shofar sólo puede expresarse cuando se instala en nuestra conciencia el conocimiento de su verdadero propósito. Si somos sinceros en nuestros intentos de cambiar, entonces ese compromiso real, combinado con los sonidos del Shofar, literalmente destruye toda la evidencia en nuestra contra.
Quiero comentar al respecto que algunos maestros actualmente enseñan basados en la sabiduría de nuestros sabios tradicionales, que el shofar es un llamado al alma y su sonido estridente que muchas veces nos hace estremecer, es el llamado a reconstruir lo que hemos dañado, a corregir lo que a veces pensamos que no se puede corregir, y este es el símbolo de la oportunidad. Todo, absolutamente todo se puede corregir. Solo hace falta darse cuenta, sacudirse, y retomar los temas con más sabiduría. No estamos muy lejos en este sentido del concepto cabalístico que nos trae Rav Berg.
Tanto en el ambiente cabalístico, como en el ambiente de la sabiduría ancestral tradicional, se trabaja el reto de un cambio interno, de un cambio hacia el mejoramiento del espíritu, el abrir los corazones, el ser más generoso, tratar mejor a los empleados o a la gente que le rodea, proponerse pasar más tiempo con la familia, ayudar en diversos campos cuando se puede generar la ayuda de su parte, etc. La tradición no cabalística, insta al hombre a hacer las paces con quienes le rodean, a estrechar la mano, se trabaja principalmente el concepto del perdón. Bajo el aspecto cabalístico, se trata de un trabajo interno de cambio, que al ser sincero, debe generar buenas energías capaces de hacer de la vida un camino agradable, feliz y lleno de sabiduría y reflexión. Y cuando llega Rosh Hashaná, comenta Berg, cada individuo es juzgado, no por Dios, sino por sus propios actos, siendo que cada uno de ellos va a afectar al actor, si son malas acciones, éstas se devolverán en diversas formas, pero en malas condiciones, si son buenas acciones se verán reflejadas en momentos de tranquilidad y felicidad.
El papel de Dios dentro de la enseñanza tradicional, es predominante, según Rav Berg, el papel de Dios no es el principal; el hombre debe hacer lo suyo, sea bueno o malo, y el resultado se verá reflejado durante el año como un bumerang, pero es una Ley establecida por Dios, dentro de la cual existe la capacidad de reformar.
La cábala explica que el comportamiento del hombre tiene una conexión real y directa con la salud. Más puntualmente el Zohar, trae esta definición: “Nuestras emociones reactivas, especialmente la rabia y la impaciencia, se manifiestan en nuestro hígado… Del hígado y su apéndice, emerge la hiel… la hiel se adueña de las arterias del corazón y de todas las arterias en los miembros del cuerpo… la hiel se define como “bilis” y como “amargura del espíritu” o “rencor…”
Según la Cábala, todas las emociones negativas y rabias, reunidas durante el año previo a Rosh Hashaná, han bloqueado nuestra salud o con vías de bloquearla, entonces Rosh Hashaná, con su propósito de reflexión y cambio, a través del sonido del Shofar, permite desbloquear nuestro sistema físico, permitiendo que una vida más saludable, llena de buenas energías, cambios y mejores relaciones hagan su efecto.
Quiero transcribir del portal de “Kabbalah en Español”, el siguiente concepto sobre la paz mundial, que trae también la posición del Zohar al respecto.
“Israel, según el Zohar, es el equivalente cósmico al corazón humano. En otras palabras, todo el planeta y todas las naciones son un espejo del cuerpo humano. Y cada individuo es un microcosmo del mundo. Israel funciona como el corazón de la humanidad. La relación de Israel con el resto del mundo corresponde a las arterias del corazón que transportan la sangre y el oxígeno al resto del cuerpo. Las “naciones del mundo” corresponden a los órganos y miembros del cuerpo. Por lo tanto, de la misma forma que el corazón suple sangre purificada para nutrir el cuerpo, Israel provee Luz espiritual para ayudar a todas las naciones del mundo. Si Israel NO provee Luz espiritual a las naciones, ellas se levantan en su contra, así como el cuerpo responde con la enfermedad si por sus venas fluye sangre tóxica. Lo que es más, igual que el remordimiento por nuestros actos negativos. Y así como los sonidos del Shofar pueden ahora eliminar las grasas y bloqueos en nuestras arterias, nuestro esfuerzo personal en Rosh Hashaná elimina los conflictos y barreras entre Israel y todas las naciones del mundo, aclarando el camino para la armonía global y la paz duradera en el Medio Oriente. En otras palabras, la paz comienza con el hombre en el espejo y la introspección espiritual. La paz y la salud personal llevan a la paz global y a relaciones saludables. Y todo este poder es puesto en las palmas de nuestras manos en Rosh Hashaná. Si esta información le ha ayudado de cualquier forma, por favor circúlela entre la mayor cantidad posible de personas. ESTE AÑO podemos crear la paz personal y global, si suficiente gente maneja esta sabiduría”.
Este año, quiero rogarle a Dios que nos permita a todos poder ver nuestras tristezas, nuestros dolores, poder curarlos, desbloqueando nuestros corazones para poder dar lo mejor de nosotros y hacer de éste un mundo hermoso de paz, sabiduría, justicia y amor. Sigo teniendo a Dios como mi punto de referencia porque El está por encima de todo, pero sigo creyendo también que Dios no dio el libre albedrío para que pensemos en ser mejores seres humanos cada vez.
*1: El Rav Phillip Berg, cuyo nombre original es Feivel Grumberg, (1927-2013), Fue un rabino norteamericano decano de la Organización Mundial del Cábala Center. Nacido en el seno de una familia ortodoxa. Escribió varios libros sobre el tema de Cábala y Zohar.