El Centro Kantor para el Estudio de la Judería Europea Contemporánea fue inaugurado en mayo de 2010 en la Universidad de Tel Aviv. El Centro proporciona un marco académico para la investigación interdisciplinaria de judíos europeos desde el final de la Segunda Guerra Mundial hasta la actualidad. Hoy en día hace investigaciones de antisemitismo a nivel mundial recibiendo constantemente reportes de todas las comunidades judías del mundo.
Como ya se ha convertido en una tradición desde hace algunos años, el Centro Kantor presenta, un día antes de Iom Hashoa, en la universidad de Tel Aviv, su reporte sobre el antisemitismo en el mundo.
Como ya se ha convertido en una tradición desde hace algunos años, éste reportero lo informa de forma inmediata para Hashavúa.
La presentación del reporte estuvo a cargo de la Dra. Dina Porat quien expresó que el discurso antisemita que se utilizó y se sigue utilizando, es que los judíos son quienes crearon el virus y lo propagaron al mundo porque ya tenían la vacuna preparada y al venderla, van a hacer mucho dinero. Esta mentira se propaga en las redes sociales y está soportada principalmente por Irán, la extrema derecha, los palestinos, y la izquierda radical.
Se utilizó la campaña de vacunación de Israel, y a los israelíes y judíos que ocupan puestos destacados en las empresas que producen estas vacunas (como Tal Zaks, director médico de Moderna, y el director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla) para reforzar estas acusaciones: israelíes y judíos se unen para que Israel sea el primero en recuperarse de la pandemia, mientras que el resto del mundo hace fila y pide ayuda a los judíos.
El año 2020 sin lugar a duda fue un año muy singular, el año de la pandemia, y por lo mismo el antisemitismo en el mundo tuvo varias facetas y se comportó de manera diferente.
Interesante es que bajaron considerablemente los ataques antisemitas físicos, es decir, de 456 que se reportaron el año pasado, en éste 2020 decreció a 371. La explicación es sencilla. En casi la mayoría de los países, por causa de la corona, estuvo la población encerrada. No salía de sus casas, no hubo eventos públicos no había casi aglomeración de gente.
Sin embargo, lo que llamamos el vandalismo, incrementó considerablemente en cementerios judíos, monumentos, instalaciones comunitarias ya que no había gente ni tampoco guardias o protección en los lugares.
En el 2020 decrecieron los casos de ataques físicos a judíos de 170 a 100. Pero precisamente dado que la gente se quedó en casa, estuvo expuesta varias horas diarias ante las computadoras y las redes sociales. Ahí, como todos sabemos, los mensajes antisemitas, la incitación al odio y el racismo incrementaron de forma impactante.
Un nuevo caso que se vivió de antisemitismo fue en el zoom, Cuando el zoom se convirtió en un importante medio de comunicación durante la pandemia, surgió un fenómeno llamado bombardeo de zoom: irrumpió en conferencias de zoom de sinagogas, centros comunitarios judíos y estudiantes judíos, interrumpiendo las reuniones y utilizando la plataforma para mostrar esvásticas, presentaciones o discursos antisemitas. Solo en los EE. UU se registraron 200 casos de bombardeos con zoom.
Dina Porat prometió enviarnos el reporte completo la próxima semana donde se especifica la situación de cada país.
Con ingenuidad infantil y utopía, esperamos que el próximo año se termine la tradición, porque no será necesario el reporte del centro Kantor de antisemitismo en el mundo.