A la memoria de Moshe Shimshon Aizenman, su esposa Frida Lea y su hija Rivka Matel, que vivían en Pulawy, Polonia al momento de comenzar la guerra en 1939 y murieron en el campo de exterminio de Sobibor en 1942-
A la memoria de Itzjak Milgrom y sus 4 hijas quienes vivían en Koscienice, Polonia al momento de comenzar la guerra en 1939 y murieron en el campo de exterminio de Treblinka en 1942.
A la memoria de los 6 millones de judíos exterminados en la Shoa
Sean la memoria de mis familiares y todos los judíos exterminados en la Shoa bendecida por siempre y por toda la eternidad.
Este año se conmemoran 85 años de la Shoah, si tomamos como referencia de esta trágica página de la historia de nuestro pueblo el año 1939, el año del comienzo de la segunda guerra mundial como punto de partida más comprendiendo que el Holocausto comenzó mucho antes y que fue todo un proceso gradual que se dio desde el mismo momento del ascenso de Hitler y los nazis y al poder en 1933, arribando al momento crítico del comienzo de la persecución de los judíos en Alemania en la noche de los cristales, el 11 de Noviembre de 1938.
Sin embargo, en abril del 2024, en medio de la guerra que Israel libra contra el grupo terrorista Hamas, seis meses después de la masacre del 7 de octubre, donde fuimos testigos del terrible pogrom del que fueron víctimas 1200 Israelíes en el sur de Israel , donde fueron muchos fueron asesinados, torturados, muchas mujeres fueron violadas, fueron secuestrados más de 240 personas, seres humanos fueron decapitados , personas fueron quemadas vivas, un evento catastrófico para Israel y el pueblo judío y donde aun 133 personas continúan secuestradas en túneles oscuros en Gaza como rehenes de este grupo terrorista soportando toda las barbaridades inimaginables, es un precedente que hace que este día de la Shoah tenga este año un significado especial.
Volvimos a vivir como judíos un pogrom, que considerábamos cosa del pasado de las persecuciones de los nazis, pues desde ese entonces, nosotros habíamos rememorado año tras año la Shoah y siempre hemos dicho que la historia trágica de todo lo que paso allí, es indispensable recordarla, no solo nosotros los judíos sino también toda la humanidad en todo el mundo, algo que debemos difundir y explicar al resto de los habitantes de este planeta para que nunca más vuelvan a suceder este tipo de persecuciones, no solo a nosotros como pueblo, sino también a ningún otro pueblo del mundo.
Pero Nunca jamás, como nosotros creíamos y siempre decíamos año tras año desde 1945 , ocurrió nuevamente, el 7 de octubre de 2023, y esta vez en Israel, algo que nunca imaginamos que pasaría. Entonces Nunca Jamás es ahora, porque la memoria histórica de la Shoah, así como la memoria histórica del 7 octubre estarán ligadas de una forma determinada, de ahora en adelante. Tratándose de dos eventos con proporciones diferentes y entendiendo claramente que la Shoah sobrepasa por la misma dimensión de la tragedia, toda comparación con cualquier evento de persecución que el ser humano haya sido objeto desde su existencia en este planeta, por el nivel monstruoso del Holocausto acaecido, que sobrepaso todo lo que hasta entonces había sucedido en la historia de la humanidad.
El año pasado en el verano, fui a Polonia con mi amigo Felipe y estuvimos visitando los campos de Exterminio de Auschwitz y Majdanek. Estar en estos campos de muerte y desolación donde tantos millones de judíos fueron exterminados a manos de los nazis y de sus colaboradores, fue ser testigo de la maldad y de la aberración de la especie humana en toda su intensidad. Todos aquellos sobrevivientes del holocausto dan fe de todos los horrores y torturas que pasaron en aquellos lugares espantosos donde el hambre, el frio, las torturas diarias y la muerte eran encuentros del día a día por años enteros.
Cuando salí de mi visita en cada uno de estos campos de exterminio estaba convencido que había sido lo peor que había visto en mi vida y me jure a mí mismo que sería parte integral en la transmisión de la verdad del Holocausto a todo aquel a quien pudiera hacerlo como ya de hecho lo vengo haciendo años atrás, como forma de cumplir con nuestra obligación como judíos de prevenir que nunca pasen cosas como estas en el mundo.
Nunca imagine que tuviéramos que vivir un antisemitismo como el que estamos viviendo a raíz del 7 de octubre en el mundo entero. Es algo de proporciones tan gigantescas como nunca se había vivido desde tiempos de la Shoah, lo cual significa que, como pueblo judío, estamos nuevamente en peligro, no solo en Israel, sino en el mundo entero.
Desafortunadamente, en esta generación y desde hace ya varias décadas atrás han surgido en el mundo sociedades islámicas radicales e intolerantes a otras religiones y credos religiosos, profundamente antisemitas como los ayatollas de Irán y sus organizaciones proxis de Hamas y Hezzbolah, así como la Autoridad Palestina y el estado financiador del terrorismo de Qatar que niegan nuestro derecho a la existencia como pueblo y como nación independente en la tierra de Israel y que llevan años enteros haciendo actos de terrorismo en el caso de Iran, Hamas y Hezzbolah y labor político económica de parte de estos últimos asociado al estado de Qatar deslegitimizando a Israel en los foros internacionales, las universidades de Europa y los Estados Unidos, infiltrando la política, los medios informativos tanto los tradicionales como la media digital y las redes sociales, cuyo punto álgido más elevado fue el progrom del 7 de octubre de 2023.
Este antisemitismo es similar en muchos aspectos al de los años 30 en Alemania en su contenido de odio y exclusión de nosotros como sociedad, pero diferente en muchos otros pues viene más dirigido a Israel y sus habitantes como nación del pueblo judío, por lo tanto podemos decir con exactitud y sin temor a equivocarnos que el antisemitismo moderno de hoy en día equivale al antisionismo y que todo el que se camufla detrás de este último para tratar de ejercer su odio contra nosotros, es de hecho un antisemita. Estamos acá en Israel en peligro por todas estas sociedades islámicas totalitarias que no conceden la más mínima posibilidad de convivencia pues su ideología antisemita es evidente y están los judíos del mundo entero en el mismo peligro, por las mismas razones. Estamos pues unidos todos los judíos, tanto los de Israel como los del resto del mundo contra el antisemitismo y contra toda aquel que busca deslegitimizar nuestra existencia como pueblo y como nación, hoy 85 años después de la Shoah.
Es por lo tanto hoy, más que nunca, una necesidad imperiosa de nosotros, el pueblo judío tanto en Israel como en el resto del mundo de seguir divulgando nuestra verdad histórica, de recordar la Shoah y sus trágicos hechos y de buscar la forma de fortalecer nuestra Harbara tanto en la transmisión de la memoria del Holocausto y de lo acaecido en el pogrom del 7 de octubre y la guerra que surgió a consecuencia de este asi como en nuestra necesidad de fortalecer la verdad histórica sobre el Estado de Israel, pues como pueblo judío, es nuestra nación quien nos debe de respaldar y proteger en todo momento para que podamos decir de forma contundente y sin ninguna duda al respecto Nunca Jamás.
Nunca jamás es ahora y nunca jamás lo ha sido siempre. Por la preservación de la memoria histórica de los hechos trágicos de la Shoah y de los 6 millones de judíos exterminados, que su memoria sea bendecida por siempre.