“La fuerza y el engaño son, en la guerra, las dos virtudes cardinales”. Hobbes.
Es evidente que el circo de las Naciones Unidas (ONU) no habrá de intervenir en la flagrante violación del Derecho Internacional de la Organización terrorista chiita Hezbollah que, durante más de 11 meses ha estado bombardeando, desde el sur de Líbano, sobre todas las localidades del norte del Estado de Israel, sean éstas judías, drusas o árabes, que comenzara el 08/10/2023 hasta la fecha, luego de esa otra inhumana y satánica violación fronteriza efectuada desde la Franja de Gaza por la Organización terrorista Hamas el 07/10 anterior.
Luego de una intensa lucha para erradicar a Hamas de Gaza puede decirse que la tarea del Ejército de Israel (IDF) ha sido casi completada en más del 90%, según su vocero, quedando la acción reducida a la neutralización, de acuerdo al Ministro de Defensa Yoav Galant, a un solo batallón de combatientes a cargo de su Jefe Yahya Sinwar y a la liberación de los 101 rehenes que todavía quedan en manos de estos salvajes. En poco tiempo más debería organizarse una nueva administración civil en Gaza con el control de la seguridad israelí para evitar el resurgimiento de estas bestias que habían usurpado dicho Enclave desde el año 2007.
Si bien el 07/10 fallaron todos los organismos del Estado Judío, civiles, de inteligencia, militares y de seguridad, la población supo reaccionar con firmeza a la invasión de Hamas, y lo sucedido a los terroristas de Hezbollah el 17/9 con los beepers (pager AR/924), un verdadero caballito de Troya, y el 18/09 con los handys (walkie talkie), otro efectivo troyano, fueron operaciones brillantes de todos esos mismos organismos responsables mencionados más arriba.
Es verdad. El 07/10 fue una catástrofe para Israel y cuando finalicen las operaciones en marcha, con total seguridad la Comisión Investigadora correspondiente aplicará sanciones ejemplares a los responsables de la misma. Pero lo más importante es ver el estoicismo y la resiliencia demostrada por la población en general y el Gobierno en especial para recuperar la vida del país y la iniciativa a fin de superar esa catástrofe. Todos ellos merecen las loas por luchar en tantos frentes enemigos y de supuestos “amigos” como Biden, Starmer, Harris y tantos otros. Fue muy difícil recuperarse de semejante “tropezón” que ha costado hasta ahora el asesinato de 1.200 civiles, más de 700 soldados caídos, miles de mutilados y heridos y de los 240 rehenes secuestrados, de los cuales aún quedan 101 en las garras de las bestias.
Ahora ha comenzado la 2ª. Fase: Líbano-Hezbollah. Existen dos posibilidades estratégicas para lograr la finalización del bombardeo misilístico y de drones en el norte del país: la diplomática y la militar. Los 80.000 desplazados de sus viviendas en los poblados de la Galilea no pueden ni deben esperar más para retornar a sus hogares. El Gobierno del Líbano y Hezbollah deberán decidir si quieren la paz o la guerra, ya que los tanques, las tropas, la marina y la aviación de Israel están preparados para cualquiera de los escenarios presentados.
